Consideraciones.
Las partes por el todo
Cuando era un joven estudiante de
patología médica, se le prestaba (y se le sigue prestando) mucha
atención a las muertes por infarto de miocardio o por accidentes cerebrovasculares
y nos hablaban en clase sin cesar de un estudio epidemiológico gigantesco que
se estaba llevando a cabo en EEUU en la ciudad de Framinhan,este estudio
comenzó el siglo pasado el año 1948 seleccionando a 5209 hombres y mujeres de entre 30 y 62 años, que no tenían
síntomas ni antecedentes de ninguna enfermedad del corazón ni accidente
cerebrovascular, luego se añadieron los hijos de este primer grupo en 1971,en
el 94 el grupo multicultural Omni y en el 2002 la tercera generación del grupo
original , en el 2003 los esposos de los hijos del primer grupo y en ese mismo
año un segundo grupo de Omni .De este estudio surgen los factores de riesgo
cardiovascular y una gran información
sobre estos factores de riesgo como la obesidad, la presión arterial, edad,
sexo, colesterol, triglicéridos, rasgos psicosociales; el estudio se extendió a
otras enfermedades, así como las relaciones entre características físicas y
genéticas etc, este enorme estudio epidemiológico se extendió en el tiempo
durante muchas décadas y todavía sigue arrojando luz en la actualidad; ha sido
decisivo para que los médicos tomemos conciencia de la importancia de modificar
ciertos comportamientos, para la prevención de estas patologías. Si alguien
afirma: que ahora los enfermos, son para los médicos los culpables de sus enfermedades,
comete un error de percepción, interpreta las partes por el todo, y le induce a
un error de apreciación, En ciertas enfermedades cardiovasculares pero no en
todas, si que es importante modificar los factores de riesgo; cosa que no
podemos decir de patologías genéticas, enfermedades infecciosas... ; No
obstante a medida que la investigación avance, esta modificación de
comportamientos se hará extensiva a muchas otras patologías, pero muchas
actividades preventivas serán de responsabilidad pública ,no individual, como
las patologías de las condiciones de trabajo, del hambre, de las condiciones de
insalubridad medioambiental (tóxicos físicos , químicos, psicológicos y
sociales ),sobre todo por los pesticidas
agroalimentarios y el desarrollo exponencial de las síntesis de la
química farmacéutica…pero esto por su importancia es motivo para otro artículo.
Otra
consideración-La polisemia de las palabras políticas
Cuando hablamos de
anarquismo, cosa que ocurrió en la última reunión del ateneo, no precisamos lo
que entendemos por tal; igual sucede con la palabra política, así como
democracia, legitimidad, etc. Por esto cuando expresamos términos políticos
hemos de tener mucho cuidado de explicar que valor semántico damos cuando lo
expresamos, o bien que realidad queremos reflejar con ese concepto, o sea, su
valor onomasiológico. Es cierto como dijo Javier: que son movimientos muy
interesantes, pero que siempre son aplastados. Yo añado a eso: son muy
importantes, porque todas las fuerzas, y todas las ideologías, tratan de
combatirlos y liquidarlos siempre que pueden. Tenemos el ejemplo de lo que ocurrió en Cataluña que
también describe Orwell en su libro “Homenaje a Cataluña “
Sebastien Faure dijo:
cualquiera que niegue la autoridad y luche contra ella es un anarquista, yo lo
matizaría diciendo: que todo poder que no se pueda explicar es ilegitimo y que
ese si se debe combatir. Lo cierto es que no podemos predecir como será esa
sociedad del futuro, ni como se estructurará; pero ese ideal es al que debemos
tender, procurando que desaparezcan los amos, donde todos seamos iguales. En
esta utopía me apunto y en ese sentido yo me siento anarquista; pero
aprendiendo de la historia y de cómo las gastan los que mandan .Yo concluyo con
la importancia de las diferentes
corrientes anarquistas, ya que la
mayoría han sido aplastadas y muy pocas apenas toleradas (algunas se toleran
porque el poder político no ve un
peligro inmediato), es el caso de personalidades de prestigio (léase Noam Chomsky).
Proudhon: “la propiedad es un robo” cuanta razón tenía. La historia a
justificado la propiedad de mil maneras, recurriendo a la fuerza, a la
filosofía, al derecho, a la religión (el
poder por la gracia de Dios). En esa
aspiración libertaria debemos caminar todos juntos, para que desaparezca
este mundo que nos ha dejado el poder constituido rampante. Esto es lo que os
quería expresar, cuando decía que en el mundo no conoceremos la auténtica paz, si
no nos solidarizamos con el tercero y cuarto mundo para que desaparezcan, las
injusticias que viven cada día; en la actualidad por el capitalismo neoliberal.
Esta solidaridad supone desenmascarar los intereses de las grandes
corporaciones multinacionales en connivencia con el poder político. La
globalización que nos venden es eso y ahora aunque muchos neoliberales lo
aplauden, no debemos olvidar, que los presupuestos neoliberales, no tienen nada
que ver con los liberales clásicos, estos eran clásicamente de progreso, por
estas razones hoy debemos hablar de capitalismo puro y duro, sino,
colaboraremos con la confusión reinante. La única esperanza es que los
indignados somos muchos, pero lo funesto es que ellos tienen la organización, los
medios de propaganda, la fuerza y la desvergüenza o la maldad como os guste
expresarlo.
Juan Luis Bermúdez Carbonell